El último deseo de Geralt, el artículo, es lo que viene después de este párrafo, pero tras la salida en Netfix de la serie de The Witcher, creo que puede ser útil decir que algunos relatos de este libro forman parte de la primera temporada. 

Resumen de “El último deseo”

«Geralt, el brujo, está recuperándose de las últimas heridas sufridas por una estirge en el santuario de Melitele. La semilla de la verdad parece que ha germinado en su interior y Nenneke no considera que su presencia sea un mal menor para el templo, sino una necesidad de actuar sobre su salud. No es cuestión de precio, sino de futuro y Geralt, aún habiendo viajada hasta el confín del mundo para ver lo increíble junto a unos elfos, tuvo que dar su último deseo a una hechicera.»

¿Cómo llegué a este libro?

Las recomendaciones de un amigo muy fan del videojuego fueron lo que me inclinaron a comprar los dos primeros libros de la saga de Geralt de Rivia, pero realmente no fue su vehemencia en la recomendación, sino que fuese una persona que lee muy poco y que este libro le hubiese hecho cogerse varios de la serie y explorar otros autores, que me ha recomendado también como Rothfuss. Así que si tiene poder para que un jugador de videojuegos nato lea y deje el mando de lado, ¿qué tendrá el libro en su interior?.

Un misterio

La compra fue un regalo de reyes. Me costó buscar el nombre del autor, Sapkowski. Cuando lo comencé, me resonaba una apreciación sobre el libro que mi amigo me había hecho “Es el primero y no son historias seguidas” me dijo, o algo así.

Lo dicho, a la mitad del libro lo dejé.

¿Por qué? No lo sé, no me aburría, me parecía fácil de leer, hasta divertido en ocasiones pero se quedó un buen rato en la mesilla de noche. No recuerdo exactamente qué fue lo que cogí para leer en vez de este Último deseo, miento si, dos pesos pesados, El imperio final y Los Héroes. Los cuales, encima, ahora están parados.

Bueno, no, El imperio final es el siguiente para la mesilla. Mira que soy poco constante.

Bueno, el caso es que lo retomé hace poco y en dos plís me lo terminé. Cerca del final del libro me vino el comentario que me hizo mi amigo, es decir, recordé ese detalle porque llevaba un rato pensando que el libro era un conjunto de relatos cortos. Con esa idea me metí en internet y descubrí que realmente este libro está considerado como una antología de relatos cortos donde se presenta al protagonista.

Cierto, se presenta al prota y personaje principal pero presenta más cosas y a mí me surgió una pregunta: ¿Fueron primero los relatos y luego el libro junto con los interludios que los intenta unir o realmente se planificó el libro de esta forma?, es decir, ¿qué fue antes, el huevo o la gallina? (a esta última pregunta siempre respondo lo mismo parafraseando al mejor profesor que he tenido “el huevo, pero no de ave”).

El escaparate

Este libro lo he vivido como un escaparate, una forma interesante de decir “¡Eh!, lector, mira todo lo que te vas a encontrar si te sumerges en estas aguas”. En los relatos, todos enfocados en Geralt, se puede ver quién es este personaje, su oficio, parte de su personalidad, motivaciones, un poquito de su origen, bastante de su pasado. Pero también se ven pinceladas del mundo, de la región más bien, también queda clarísimo que es un mundo de alta magia, las especies existentes, la organización de la sociedad, la época histórica y también dejan claro que hay un cambio de paradigma. Vamos un escaparate inmejorable para que un lector curioso que se acerque sin saber muy bien qué hay en esa tienda, le quede clarito. Eso no quita que después todo vaya cogiendo más profundidad, espero porque seguiré leyendo libros de esta saga.

Imagen promocional del juego de The Witcher 3 Wild Hunt.

La magia

De lo que recuerdo, no suelo ser de tomar notas (mal, Sergio, mal), en el libro se presentan varios tipos de magia, y con tipos me refiero quizás más a profesiones que utilizan la magia que al tipo de magia en sí porque en el último relato, el que da nombre a la antología, creo que queda claro que es un tipo de magia de canalización de energías.

Tenemos a los brujos que son capaces de realizar hechizos pero también canalizar la magia a través de símbolos de poder gesticulados y mediante pociones que otorgan capacidades impresionantes a éstos, después tenemos los típicos hechiceros y druidas, que canalizan la energía de la Naturaleza a través de conjuros y hechizos.

Y por último está la magia clerical, aquella que canaliza la energía a través de la fe y las oraciones. La magia asociada a los brujos es la novedad, se ve que es una magia alquímica además de hechiceril que puede ser muy interesante.

Términos, términos

Una cosa que en notado durante la lectura ha sido la utilización de términos muy asociados a la ciencia y conocimiento biológico, como por ejemplo hormonas y neurotransmisores, que me sacan completamente de la lectura, del ambiente. Se me hace muy difícil aceptar que en un mundo mágico-medieval, sean capaces de saber de la existencia de moléculas tan pequeñas, complejas y específicas.

Y ya no digo nada que encima sepan qué hacen y cómo actúan. Desde mi punto de vista, o el traductor no encontró términos mejores para realizar la traducción o el autor decidió utilizar esos términos y conceptos, cosa que a mí, no me gusta.

También se puede leer que el autor ha tomado ideas de cuentos clásicos, cuentos para niños pero que les ha dado un enfoque diferente, más acorde con el ambiente de su mundo, como por ejemplo el de la Bella y la Bestia, que lo aborda en el relato «La semilla de la verdad», pero sinceramente, debo ser muy despistado porque, mientras lo leía, me daba un regusto a algo conocido, pero no fui capaz de encontrar las semejanzas e inspiraciones de uno en el otro.

Unas buenas reseña de este libro se pueden leer aquí, en El Caballero del Árbol sonriente y en El Rincón de Cabal